Léxico emocional: ¿En qué puede ayudarte?
No temas conectar con tus emociones.
Eres una olla exprés y los emojis de Whatsapp cumplen una función social. Sigue leyendo y sabrás por qué (contenido gratuito descargable al final).
En este artículo te enseño a hablar de emociones. De emociones y de sentimientos; que no son lo mismo.
Los humanos observamos el entorno y lo definimos para poder contextualizarnos en él. Definir el mundo que nos rodea, relacionarnos y expresarnos sobre él son necesidades humanas. ¿Te imaginas una conversación de Whatsapp sin emojis? No sería lo mismo. De hecho, sería bastante peligroso. Necesitamos ponerle una emoción, una carita que le dará intencionalidad y tonalidad a nuestro mensaje (antes de que el receptor lo interprete por su cuenta). Y todo esto realmente no es nuevo; ya lo hacíamos al pasar notitas clandestinas en clase. O bien dibujando una expresión facial o buscando la cara del emisor.
Etiquetar, es decir, poner nombre a algo, no tiene por qué culminar en una clasificación permanente y rígida. Con el afán de romper cadenas y estereotipos se empieza a impulsar de forma más directa e intensificada (especialmente en los últimos años) el rechazo a denominar ciertos aspectos, situaciones e incluso estados emocionales.
Esta sólo es una de las muchas razones por las cuales nos cuesta tanto responder a preguntas tan sencillas como: ¿Cómo te sientes?
Muchas personas sienten rechazo e incluso pavor a conectar consigo mismas. En ocasiones por miedo a que la emoción que impera en su interior tome el control. Y es normal; siempre queremos que nuestro ‘yo’ más estable sea quien vaya al volante. Pero lo cierto es que nos parecemos más a una olla exprés que a un coche. Si la mantienes tapada la presión aumenta y la olla se queja, silba y humea. Al final la goma se sale del sitio y rebienta.
Las emociones existen de forma material. No puedes barrerlas debajo de la alfombra y esperar a que desaparezcan. Al final hay tantas bolas de pelusa que ya no es una alfombra; eso empieza a parecerse más al Dakar. Así que ya no puedes pretender deambular a pie sobre él; ahora ya necesitas una moto o un 4x4 que, con tanta duna, al final vuelca.
Otra de las razones por las cuales somos tan patosos a la hora de conectar y definir cómo nos sentimos es, simplemente, que no sabemos cómo. Solemos adquirir un léxico bastante pobre en ese aspecto; en la escuela (aunque actualmente se incide más en esto con los más peques) no nos enseñaron de forma explícita a darle importancia a nuestras emociones, a definirlas o a expresarlas.
En resumen; que las emociones están ahí para atenderlas y gestionarlas de la manera más adaptativa posible.
Y para atender a nuestras emociones como es debido (tanto si te encuentras o no en un proceso terapéutico) es crucial que sepamos, como mínimo, identificarlas y ponerles nombre.
Por todo esto y muchas más razones que no caben en un solo artículo te regalo esta herramienta que te va a ir de perlas:
LA LISTA DEFINITIVA DE EMOCIONES Y SENTIMIENTOS
Mari Zafra psicóloga y psicoterapeuta en Barcelona.